En una sartén grande, caliente el aceite de oliva a fuego medio. Agregue la cebolla picada y el ajo picado, y saltee hasta que la cebolla esté transparente.
Agregue la carne molida a la sartén y cocine hasta que se dore, deshaciéndola con una cuchara mientras se cocina.
Agregue las zanahorias, el apio y los guisantes, y cocine durante 5 minutos más. Añade los tomates picados y escurridos y el caldo de res a la sartén. Incorpora el tomillo, el orégano, la sal y la pimienta. Deja cocer a fuego lento durante unos 10 minutos.
Transfiere la mezcla de carne y verduras a una bandeja rectangular para hornear.
Espolvorea el queso cheddar rallado uniformemente por encima.
En un tazón pequeño, mezcla el pan rallado con un poco de aceite de oliva y luego espolvorea el queso por encima para crear una costra.
Hornea en el horno precalentado durante 25-30 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y crujiente.
Deja enfriar la cazuela unos minutos antes de servir.
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Variaciones y consejos
Para una versión más ligera, puedes usar pavo o pollo molido en lugar de carne. Agrega más verduras como calabacín o pimientos morrones para un toque más nutritivo. Si prefieres un toque más picante, añade una pizca de hojuelas de pimiento rojo o un chorrito de salsa picante a la mezcla de carne. Para una opción sin gluten, utilice pan rallado sin gluten o elimínelo por completo.
