-
Podés usar solo carne de vaca o hacerlos con pollo picado si preferís.
-
Si te sobran, podés guardarlos en la heladera y recalentarlos al horno o en sartén al día siguiente.
-
Para hacerlos más suaves, podés reemplazar parte del pan rallado por avena procesada.
-
Acompañalos con una ensalada fresca, arroz blanco o un poco de puré.
Estos bocaditos con carne picada son súper prácticos y sabrosos, ideales para resolver una comida sin complicarte.
¡Seguro que en tu casa van a pedir que los repitas!