Lavar los platos, una tarea doméstica diaria, puede ser fatal si se hacen estas cosas. Recientemente, una mujer de 67 años en China falleció en un accidente mientras lavaba platos en la cocina.
En concreto, la Sra. Li, aunque llevaba muchos años jubilada, seguía trabajando duro. Ese día, hacía un calor inusual y estaba ocupada en la cocina con un montón de platos. Llevaba mucho tiempo con problemas de cintura y también tenía la presión arterial ligeramente alta, pero siempre pensó que era una “enfermedad leve, nada grave”.
De repente, mientras lavaba los platos, la Sra. Li sintió un fuerte mareo y dolor en el pecho; el recipiente se le resbaló de la mano y cayó al suelo. Tuvo que apoyarse en la pared para sentarse, respirando con dificultad y sudando profusamente. Los vecinos oyeron el ruido, corrieron y llamaron a la ambulancia de inmediato. Desafortunadamente, cuando llegó la ambulancia, la Sra. Li había fallecido de un infarto repentino.
Esta tragedia nos alerta: ¡A medida que envejecemos, no podemos tomarnos las tareas del hogar a la ligera! Sobre todo en tareas aparentemente sencillas como lavar los platos, existen riesgos ocultos.