Si quieres una versión aún más aromática, añade una pizca de nuez moscada o clavo molido.
Se conservan bien hasta una semana en una lata o un tarro de cristal.
También son un regalo estupendo, presentadas en una bolsita con un lazo: olerán aún mejor al día siguiente.
Para mí, las castagnelle son el postre de la paciencia y el aroma. Son rápidas de hacer, pero mientras las amasas, te transportan a una época en la que la cocina estaba llena de manos enharinadas y ollas hirviendo a fuego lento. Perfectas con un té caliente o un café amargo. Una de esas pequeñas cosas que te hacen sentir en paz con el mundo, aunque solo sea por cinco minutos.
¿Qué son las castagnelle?
Las castagnelle son unas galletas rústicas típicas de Apulia, que se hornean con los primeros fríos. Tienen aroma a naranja y canela, y almendras que crujen al morderlas.
¿Cuáles son los ingredientes para hacer castagnelle?
Para hacer castagnelle, necesitarás: almendras tostadas y picadas, harina, eritritol (o azúcar moreno), chocolate negro, cacao amargo, bicarbonato de sodio, canela, ralladura de naranja y limón, agua tibia y azúcar glas para decorar.
¿Cómo se conservan las castagnelle?
Las castagnelle se pueden conservar hasta una semana en una lata o un tarro de cristal.