¡Volvamos a los pimientos! Colócalos en bolsas de plástico y déjalos reposar de 10 a 15 minutos. En este punto, pela bien todos los pimientos, lo cual puede ser tedioso, pero esencial. Abre cada pimiento, quizás formando rodajas finas, y coloca la mezcla anterior dentro.
Enróllalos lentamente y sujétalos con un palillo, como si fueran rollos de carne. Colócalos en una bandeja para hornear y, después de añadir más queso, hornéalos durante unos 20 minutos. ¡Tus rollitos de pimiento rellenos están listos!
Ahora hornéalos durante unos 25-30 minutos a 200 °C.