Olvídate de los postres azucarados: este pastel de manzana otoñal es naturalmente dulce, ligero y delicioso; lo preparo en 10 minutos.

En un bol grande, batir los huevos con la ralladura de limón, la miel y el yogur griego hasta obtener una mezcla homogénea.

2. Preparar las manzanas

Pelar las manzanas y cortarlas en rodajas finas. Rociarlas inmediatamente con zumo de limón para evitar que se oxiden y reservar.

3. Completar la masa

Añadir el aceite a la mezcla de huevo y remover. A continuación, incorpore la harina tamizada, el polvo de hornear y las pasas remojadas. Añada las manzanas en rodajas y mezcle suavemente con una espátula.

4. Hornee el pastel
Forre un molde para hornear con papel vegetal y vierta la masa, alisándola uniformemente. Pique las almendras y espolvoréelas por encima para darle un toque crujiente. Hornee en un horno precalentado a 180 °C (350 °F) durante unos 50 minutos. Compruebe siempre la cocción con un palillo: si sale limpio, el pastel está listo.

5. Sirva y conserve
Deje que el pastel se enfríe por completo antes de cortarlo. Consérvelo en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante 2-3 días. Para un resultado aún más delicioso, caliéntelo en el microondas durante unos segundos antes de servir.

Consejos y variaciones
Puede sustituir las almendras por nueces o avellanas para un sabor diferente.

Añada una cucharadita de canela a la masa si le gustan las notas especiadas.

Si prefieres una textura más húmeda, ralla media manzana directamente en la masa.

Para una versión sin miel, puedes sustituirla por edulcorante natural o simplemente omitirla: las manzanas seguirán aportando el dulzor.

Leave a Comment