Paso 1: Mezclar los Ingredientes Secos
En un tazón grande, coloca la fécula de maíz, la sal y el polvo de hornear. Mezcla bien estos ingredientes para que se integren y asegúrate de que no queden grumos.
Paso 2: Agregar los Ingredientes Húmedos
Añade el queso rallado, el huevo, la leche y la mantequilla derretida a los ingredientes secos. Con una espátula o una cuchara, mezcla todos los ingredientes hasta que obtengas una masa homogénea. Si notas que la masa está un poco seca, agrega un poquito más de leche, una cucharadita a la vez, hasta lograr la consistencia deseada.
Paso 3: Formar las Bolitas
Divide la masa en pequeñas porciones y forma bolitas del tamaño de una nuez o un poco más grandes, según tu preferencia. Estas porciones serán los panes individuales de queso.
Paso 4: Cocinar en Sartén
Calienta una sartén antiadherente a fuego medio-bajo. Coloca las bolitas de masa en la sartén; no necesitas añadir aceite, pero puedes poner un poquito si prefieres un dorado más uniforme. Cocina cada bolita durante 3-4 minutos por cada lado o hasta que estén doradas por fuera y bien cocidas por dentro.
Paso 5: Servir Caliente
Cuando los panes de queso estén dorados y esponjosos por dentro, estarán listos. Sírvelos calientes para disfrutar de su textura suave y sabor a queso.
Muchas Gracias…
fuente: lasrecetasdelaabuela
Ingredientes
200 g de fécula de maíz (maicena)
1 huevo
1 cucharada de mantequilla derretida
200 g de queso rallado (puede ser mozzarella, cheddar o una mezcla)
3 cucharadas de leche (puede ser leche vegetal si prefieres una versión sin lactosa)
1/2 cucharadita de sal (ajusta la cantidad según el tipo de queso que uses)
1/2 cucharadita de polvo de hornear