Preparación
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Activar la levadura
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Disolver la levadura en el agua tibia con una pizca de azúcar.
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Dejar reposar 5–10 minutos hasta que haga espuma.
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Preparar la masa
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Mezclar harina, azúcar y sal en un bol grande.
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Agregar la mezcla de levadura, la leche tibia y los huevos.
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Mezclar hasta formar una masa pegajosa.
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Incorporar la mantequilla
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Agregar la mantequilla suavizada poco a poco, amasando hasta que se integre.
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Amasar ~10 minutos a mano o ~7 minutos en batidora con gancho, hasta que la masa sea suave, elástica y ligeramente pegajosa.
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Primer levado
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Colocar la masa en un bol engrasado, cubrir y dejar reposar en un lugar cálido 1–2 horas, hasta que doble su tamaño.
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Formar los panecillos
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Desgasificar la masa y dividir en 12–15 porciones iguales.
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Formar bolas suaves o pequeños cilindros y colocar sobre una bandeja con papel pergamino.
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Segundo levado
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Cubrir ligeramente con un paño y dejar reposar 45–60 minutos hasta que estén esponjosos.
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Hornear
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Precalentar el horno a 190°C (375°F).
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Pincelar la superficie con el huevo batido.
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Hornear 18–22 minutos, hasta que estén dorados y suenen huecos al golpearlos ligeramente.
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Enfriar y servir
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Dejar enfriar un poco antes de servir.
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Se disfrutan mejor calientes, acompañados de mantequilla, mermelada o miel 🍯.
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✨ Tip: Para panecillos extra suaves, pincelar con mantequilla derretida justo después de hornear.