Mezclar los ingredientes secos
En un recipiente grande, tamice juntos la harina, el polvo para hornear, el azúcar y la sal.
Preparar ingredientes húmedos
En otro recipiente, bata la leche, el huevo, la mantequilla derretida y el extracto de vainilla hasta obtener una mezcla suave.
bien
Haga un hueco en los ingredientes secos y vierta la mezcla húmeda.
Revuelve suavemente hasta que se integren los ingredientes; no los mezcles demasiado. La masa debe quedar ligeramente grumosa para que los panqueques queden esponjosos.
Cocinar los panqueques
Calienta una sartén o plancha antiadherente a fuego medio y engrasa ligeramente con mantequilla.
Vierta aproximadamente ¼ de taza de masa en la sartén para cada panqueque.
Cocine hasta que se formen burbujas en la superficie y los bordes se vean firmes, luego voltee y cocine el otro lado hasta que esté dorado.
Atender
Apila los panqueques en un plato, cúbrelos con una nuez de mantequilla y rocíalos con almíbar, miel o tu aderezo favorito.
Conclusión
Estos esponjosos panqueques caseros son un clásico del desayuno que nunca pasa de moda. Fáciles de preparar y muy versátiles, se pueden disfrutar solos, endulzados con jarabes y frutas, o incluso salados con queso y hierbas. Cada bocado es ligero, suave y reconfortante, perfecto para empezar el día con un toque cálido y delicioso. Ya sea para un desayuno familiar de fin de semana o para un brunch especial, seguro que alegrarán la mesa.