Pastel de coco para quienes tienen prisa: licuar, hornear y esperar. Está aún mejor al día siguiente (según una nutricionista).

Esta receta nació en una tarde un tanto confusa: hacía calor, no tenía ganas de amasar, pero sí un antojo irresistible de algo con sabor a coco. A veces los pasteles de coco me decepcionan: están buenos, pero secos. Quería un pastel cremoso, casi como un pudín, pero que siguiera siendo un pastel, de esos que cortas y dices “¡mmm!”.

Lo eché todo en la licuadora, crucé los dedos y… ¡sorpresa!: aroma a limón, coco con sabor a playa y una textura suave. Listo en 10 minutos. El horno hace el resto, y luego hay que tener paciencia para dejarlo enfriar (lo sé, es lo más difícil).

El pastel de coco más cremoso hecho completamente en la licuadora: 10 minutos de trabajo, sin mantequilla ni azúcar blanca.

Pastel de Coco

Tiempo de preparación: 10 minutos

Cocción: 50-55 minutos a 160 °C (temperatura estática)

Total: ~60-65 minutos + enfriamiento completo

Calorías (8 porciones)
Depende de tus opciones:

Con eritritol y leche vegetal: ~135 kcal por porción

Con azúcar de coco y leche entera de vaca: hasta ~240 kcal por porción

(La verdad suele estar en un punto intermedio; yo diría que es una porción ideal y ya está).

Ingredientes

320 g de leche (de vaca o vegetal sin azúcar; coco, almendra, avena, etc.)

1 huevo

180 g de eritritol (o azúcar de coco, la misma cantidad)

70 g de harina de coco

50 g de aceite de coco (derretido, pero no hirviendo)

60 g de maicena (o harina de trigo)

Ralladura de 1 limón (solo la parte amarilla)

Para decorar: azúcar glas o eritritol en polvo

Variantes más ligeras: pepitas de chocolate (60-80 g), una cucharadita de extracto de vainilla, una pizca de sal para realzar el sabor a coco.

Preparación

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