Foto aérea; fondo blanco con textura; Ingredientes del pastel de mantequilla de cacahuete colocados sobre el fondo;
Sabor a Hogar
Harina multiusos: Para un pastel de mantequilla de cacahuete texano resistente que conserve una miga húmeda y tierna, la harina multiusos es la mejor opción.
Azúcar: Este pastel de mantequilla de cacahuete se endulza con 2 tazas de azúcar granulada y 2/3 de taza de azúcar para el glaseado.
Bicarbonato de sodio: Asegúrate de que el bicarbonato de sodio no esté caducado. Si se almacena correctamente, ¡puede durar hasta dos años! Sin embargo, si lo has mantenido abierto en su caja original, suele durar solo los primeros seis meses.
Mantequilla: Corta en cubos 3/4 de taza de mantequilla (equivale a 1 1/2 barras) para que se derrita más fácilmente con el agua. Mantequilla de cacahuete con trozos: Este pastel de mantequilla de cacahuete con glaseado solo usa un tipo de mantequilla: la gruesa. Puedes usar la suave, pero los trozos le dan un toque crujiente sutil y delicioso.
Aceite de canola: De sabor neutro y líquido en su estado natural, el aceite de canola crea una textura rica y suave, y una miga tierna.
Huevos: Pon dos huevos a temperatura ambiente sacándolos del refrigerador 30 minutos antes de empezar la receta del pastel de mantequilla de cacahuete con glaseado.
Suero de leche: El ligero sabor ácido del suero de leche realza la consistencia de la mantequilla de cacahuete y el glaseado ultradulce, evitando que el pastel quede demasiado relleno.
Extracto de vainilla: Redondeamos los sabores y le añadimos un toque dulce (¡la mantequilla de cacahuete puede ser bastante salada!) con un toque de extracto de vainilla.
Glaseado: Nuestro cremoso glaseado de mantequilla de cacahuete está hecho con mantequilla de cacahuete con trozos, mini malvaviscos, azúcar, leche evaporada, mantequilla y extracto de vainilla. Instrucciones
Paso 1: Prepara el molde
Precalienta el horno a 175 °C. Usa aceite en aerosol o mantequilla derretida para engrasar un molde para hornear de 38 x 25 cm.
Consejo del editor: Si no tienes un molde de este tamaño, puedes sustituirlo por uno más común de 33 x 23 cm. Ten en cuenta que el tiempo de horneado variará y que tu molde quedará bastante lleno.
Paso 2: Prepara la masa