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Cocer la pasta: cocina la pasta en agua con sal hasta que quede al dente.
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Saltear las verduras: en una sartén con aceite de oliva, sofríe las verduras hasta que estén tiernas y aromáticas.
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Mezclar los ingredientes: en un bol, combina la pasta cocida, las verduras, los huevos batidos y el queso. Mezcla bien.
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Condimentar: añade sal, pimienta y tus especias favoritas.
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Hornear: vierte la mezcla en un molde engrasado y hornea a 180 °C durante 25-30 min, hasta que esté dorado y firme.
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Servir: deja enfriar unos minutos, corta en porciones generosas ¡y disfruta!
Consejos y variaciones
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Usa pasta integral o sin gluten según tus necesidades.
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Agrega nueces troceadas para un toque crujiente.
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Cambia el queso por levadura nutricional si prefieres una opción vegana.
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Prueba con verduras de temporada para hacerlo más económico y fresco.
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Dale un giro diferente con salsa de soja y jengibre para un aire asiático.
