1) Precalentar el horno a 200 °C.
2) Asegurarse de que las papas estén bien lavadas. Colocarlas en una bandeja para hornear y pincharlas por todos lados con un tenedor. Untarlas con aceite de oliva y sazonar generosamente con sal y pimienta. Hornear durante 1 hora.
3) Retirar las papas del horno y dejarlas enfriar hasta que estén lo suficientemente blandas como para manipularlas. Cortar las papas frías por la mitad a lo largo, vaciar el interior y colocarlas en un tazón grande. Dejar un poco de papa dentro para fortalecer la piel.
4) Precalentar el horno a 175 °C.
5) Triturar las papas en un tazón y agregar la mantequilla, el queso crema, la crema agria, la sal y la pimienta. Mezclar hasta obtener una mezcla suave. Incorpore con cuidado el brócoli y el tocino picado.
6) Vierta la mezcla de papas en las pieles de papa y colóquelas en una bandeja para hornear forrada con papel vegetal. Cubra cada papa con queso cheddar rallado y una pizca de pimentón.
7) Hornee durante 20 minutos. Retire del horno y deje enfriar durante 10 minutos.
Patatas y brócoli al horno: ¡una forma fantástica de sorprender a tus invitados!
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