Usa aceite vegetal y caliéntalo a 180 °C.
Fríe los trozos de pollo en tandas pequeñas para evitar que la temperatura del aceite baje. Esto asegura un exterior dorado y crujiente.
Coloca el pollo frito sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
5. Preparación de la Salsa
Cocina el jugo de naranja, salsa de soya, azúcar y vinagre de arroz a fuego lento. Espesa la salsa con almidón de maíz disuelto en agua.
Con estas técnicas, obtendrás un pollo crujiente y una salsa deliciosa que juntos crean un plato irresistible.
Preparación de la Salsa de Naranja
La salsa de naranja es el corazón del pollo a la naranja al estilo chino. Su combinación de sabores dulces, ácidos y salados hace que este plato sea único. Aquí tienes los pasos detallados para prepararla a la perfección:
Ingredientes para la Salsa
1 taza de jugo de naranja fresco (preferiblemente naranjas navel).
3 cucharadas de azúcar o miel.
2 cucharadas de salsa de soya.
1 cucharada de vinagre de arroz.
1 cucharadita de jengibre fresco rallado (opcional, para un toque aromático).
1 cucharada de almidón de maíz disuelto en 2 cucharadas de agua.
Pasos para Prepararla
Combina los ingredientes base:
En una sartén o cacerola, mezcla el jugo de naranja, azúcar, salsa de soya, vinagre de arroz y jengibre.
Cocina a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, hasta que el azúcar se disuelva por completo.
Espesa la salsa:
Agrega lentamente la mezcla de almidón de maíz y agua mientras revuelves constantemente. Esto evitará grumos.
Cocina a fuego bajo hasta que la salsa alcance una consistencia espesa y brillante.
Ajusta los sabores:
Prueba y ajusta al gusto, añadiendo más azúcar para dulzura o más vinagre para acidez.
Esta salsa, lista en minutos, es el complemento perfecto para darle al pollo su característico sabor y brillo.
Para acompañar este plato, puedes explorar recetas como el arroz frito con carne, que aporta un toque complementario a la experiencia culinaria.