Base cremosa: En un recipiente de vidrio (preferiblemente rectangular), vierte los copos de avena, las semillas de chía y el yogur. Agrega la mitad de la leche vegetal y mezcla bien con una espátula o cuchara hasta obtener una mezcla homogénea. Vierta el resto de la leche, vuelva a mezclar, tape y refrigere.
Compota de fresa: Si las fresas están congeladas, colóquelas en una cacerola a fuego lento durante unos 5 minutos hasta que se ablanden y empiecen a soltar líquido. Añada la gelatina neutra en polvo y mezcle bien para evitar grumos y que la consistencia sea un poco más espesa. Endulce al gusto si las fresas están demasiado ácidas.
Montaje: Vierta las fresas calientes sobre la base de yogur y avena, distribuyéndolas uniformemente. Añada el jugo que suelte durante la cocción. Tape y refrigere durante la noche. Por la mañana, tendrá un postre/desayuno cremoso, fresco y compacto en capas.
Este postre de fresa es un capricho nutritivo que puede disfrutar a diario. Se conserva perfectamente de 2 a 3 días en el refrigerador, es fácil de transportar y se puede personalizar añadiendo nueces picadas, cacao amargo o una cucharadita de crema de cacahuete.
Para preparar este postre helado de fresa, ¡vea la videoreceta aquí!
¿Cuáles son los ingredientes principales de este postre helado de fresa? Los ingredientes principales son: fresas, copos de avena, yogur, leche vegetal y semillas de chía. Opcionalmente, puedes añadir gelatina natural y edulcorante.
¿Para quién es adecuado este postre helado de fresa?
Es ideal para quienes siguen una dieta baja en calorías, una dieta equilibrada o simplemente buscan una alternativa saludable a los postres envasados.
¿Cuánto tiempo se tarda en preparar este postre helado de fresa?
Se tarda unos 15 minutos en prepararlo, más al menos 6 horas de reposo en el refrigerador.