Para que te hagas una idea, una familia de cuatro personas puede gastar más de 100 litros de agua al día solo tirando de la cadena después de orinar.
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¡Al final del año, eso son más de 36.000 litros! Mientras tanto, miles de personas en todo el mundo luchan a diario para obtener suficiente agua potable para cubrir sus necesidades básicas.
¿Tiene sentido desperdiciar tanta agua limpia solo para orinar?
La respuesta es clara: no.
Una regla sencilla para reducir el desperdicio
Un consejo simple que ya adoptan muchas familias con conciencia ambiental es el siguiente:
“Si es amarillo, espera. Si es marrón, tira de la cadena”.
Esta regla básica indica claramente que no es necesario tirar de la cadena después de cada vez que se orina.
La orina, al contrario de lo que muchos creen, no es peligrosa ni antihigiénica.
Mantener la taza del inodoro limpia con regularidad garantiza un ambiente saludable y libre de olores desagradables.
No tiene por qué ser complicado ni desagradable
Quizás te preguntes: ¿y los olores? La respuesta es más sencilla de lo que parece.
