Si experimentas adormecimiento en las manos y pies, existen varios remedios caseros que pueden ayudarte a aliviar los síntomas. Estos enfoques son naturales y pueden ser incorporados en tu vida diaria sin necesidad de recurrir a medicamentos.
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Ejercicios de estiramiento
Realizar ejercicios de estiramiento suaves puede ser muy eficaz para combatir el adormecimiento. Moviendo las manos y los pies, podemos facilitar la circulación sanguínea y aliviar la presión sobre los nervios. Prueba estos ejercicios simples:
Flexiona y extiende los dedos de las manos y pies.
Gira las muñecas y tobillos en círculos.
Estira los brazos por encima de la cabeza y luego deja caer suavemente los brazos a los lados.
Baños de agua caliente con sal de Epsom
Un baño de agua caliente con sal de Epsom puede ayudar a relajar los músculos y mejorar la circulación. Disolver una taza de sal de Epsom en agua caliente y sumergir las manos o pies puede ser un remedio muy efectivo para aliviar la sensación de hormigueo.
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