1. Preparar la crema
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En un bol frío, bate la crema para batir con el azúcar y la vainilla hasta obtener picos suaves.
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Reserva en el refrigerador hasta el momento de montar el postre.
2. Humedecer las galletas
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Vierte el almíbar o el jugo de durazno en un recipiente poco profundo.
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Sumerge rápidamente las galletas, evitando que se deshagan.
3. Montar el postre
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En un molde o copas individuales, coloca una capa de galletas humedecidas.
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Añade una capa de crema batida.
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Distribuye trozos de durazno sobre la crema.
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Repite las capas según el tamaño del recipiente, terminando con crema y durazno.
4. Decorar y refrigerar
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Opcionalmente, espolvorea canela, nueces picadas o coloca hojas de menta para decorar.
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Refrigera al menos 1 hora antes de servir para que los sabores se integren.