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Limpieza de las cáscaras: Enjuaga las cáscaras de ajo con agua fría para retirar cualquier suciedad o impureza.
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Tostado opcional: Para un sabor más profundo y ahumado, tuesta las cáscaras de ajo en una sartén seca durante 2–3 minutos hasta que desprendan un aroma intenso.
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Cocción: En una olla grande, añade las cáscaras de ajo, la cebolla (con piel), las zanahorias, el apio, las hojas de laurel, el jengibre y los granos de pimienta. Cubre con los 2 litros de agua y lleva a ebullición.
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Cocción a fuego lento: Una vez que el agua haya hervido, reduce el fuego y deja que el caldo se cocine a fuego lento durante 40–50 minutos.
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Colado y almacenamiento: Retira del fuego y cuela el caldo para eliminar los sólidos. Vierte el líquido en un recipiente hermético y deja que se enfríe antes de guardarlo en el refrigerador. Puedes conservarlo hasta por 5 días o congelarlo en porciones individuales para usar más adelante.
