-
Con frutas frescas: fresas, frambuesas o mango en capas alternadas.
-
Versión con chocolate: añade cacao en polvo o chocolate derretido al pudín.
-
Toque especiado: una pizca de canela o ralladura de limón.
-
Crumble alternativo: sustituye las galletas por frutos secos tostados (almendras, nueces o avellanas).
-
Presentación elegante: sirve en copas de cristal y añade un toque de nata montada.
Beneficios de preparar pudín casero
-
Saludable y natural: control total de los ingredientes.
-
Económico y sencillo: pocos elementos accesibles para un postre sofisticado.
-
Creativo: adapta sabores según gustos personales.
-
Confortante: ideal para cerrar una comida y compartir en familia.