Gracias a su alto contenido en fibra, la remolacha estimula el tránsito intestinal, favorece una digestión saludable y ayuda a mantener la regularidad. Además, contiene betaina, un compuesto que protege el hígado y apoya su función.
3. Corazón más sano
Los nitratos también contribuyen a reducir la presión arterial de manera natural, lo cual beneficia la salud cardiovascular y disminuye el riesgo de enfermedades del corazón.
4. Piel más luminosa
El poder antioxidante de los pigmentos naturales de la remolacha (las betalainas) combate los radicales libres, lo que puede reflejarse en una piel más limpia, luminosa y saludable.
5. El curioso cambio de color
Una advertencia común: después de comer remolacha, es normal que la orina o las heces se tiñan de un color rojizo. No te alarmes, es completamente inofensivo y se debe a los pigmentos naturales.
Receta sencilla: Remolachas al horno
Ingredientes: