¿Se pueden comer setas crudas? La respuesta es sí, siempre que se tenga en cuenta la variedad. Existen algunas que se pueden consumir sin cocinar. Veamos cuáles son.
Por Ilaria Canevara
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¿Se pueden comer setas crudas? A primera vista, muchos dirían que no: son un alimento que, si no se manipulan, hierven y cocinan adecuadamente, pueden ser perjudiciales, incluso las variedades comestibles. Sin embargo, en realidad, la respuesta es sí: algunas setas se pueden comer crudas, y probablemente el número de estas especies sea mayor de lo que mucha gente piensa.
Las setas se encuentran entre los alimentos que más se recomienda cocinar, pero si se observan con atención, hay algunas variedades que también se pueden comer crudas, por ejemplo, en carpaccio o ensaladas. De hecho, algunas parecen ser incluso más sabrosas crudas. ¿La razón? Gran parte de su valor nutricional se pierde durante la cocción.
Pensemos en la trufa, una seta hipogea que se suele comer en láminas o rallada directamente sobre pasta o carne. Y sí, entre las especies que se pueden consumir crudas se encuentran las apreciadas setas porcini.
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Setas que podemos comer crudas
Es evidente que las setas son un alimento que requiere mucho cuidado. Incluso las variedades comestibles necesitan una manipulación cuidadosa. Y para consumirlas crudas, es necesario prestar especial atención a la calidad y el tipo de seta.
Las setas crudas son menos digeribles que las cocinadas, por lo que es mejor evitar consumirlas en exceso. También es importante que estén maduras y, sobre todo, frescas. Las setas congeladas y secas, en cambio, deben cocinarse bien antes de consumirlas.
