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Vierte la mezcla y deja que escurra durante al menos 1 hora (o más, según la consistencia deseada).
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Para acelerar, puedes colgar el paño sobre el fregadero.
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Sazonar y moldear
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Una vez escurrido, transfiere el queso a un bol.
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Agrega sal al gusto y, si quieres, hierbas, especias o ajo.
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Mezcla bien. Puedes comerlo así o moldearlo en un recipiente.
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Almacenamiento
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Guardar en el refrigerador en un recipiente hermético.
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Dura 3–5 días, según los ingredientes añadidos.
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Más escurrido → más firme (tipo feta).
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Menos escurrido → más cremoso (tipo ricotta).
