Durante una entrevista con la periodista Elisa Beristain, los padres aclararon que ellos no produjeron el documental, aunque participaron para contar su versión y compartir pruebas que las autoridades no habían mostrado. Ambos insistieron en que el trabajo audiovisual evidencia la falta de eficacia y transparencia de quienes debían haber actuado desde el primer momento.
Beristain resumió lo que muchos sienten al conocer los nuevos datos: “Debanhi Escobar estaba viva cuando sus padres la estaban buscando”, una frase que refleja la frustración y el dolor de una familia que no logró rescatar a su hija a tiempo por la negligencia institucional.
Debanhi, quien soñaba con ser modelo y abogada, había tomado clases de tae kwon do para aprender a defenderse. Sus padres recordaron que era una joven valiente, y que en los videos difundidos durante la investigación se la ve intentando resistir ante los abusos, aunque se encontraba en clara desventaja.
A tres años del crimen, no hay personas detenidas ni responsables procesados, lo que ha generado indignación social y ha puesto nuevamente en debate la falta de justicia en los casos de violencia contra mujeres en México. Mario Escobar señaló su decepción hacia algunas autoridades, a las que calificó de “corruptas y nefastas”, aunque también reconoció que han recibido apoyo de funcionarios que sí han intentado ayudarlos.
Con firmeza, el padre de Debanhi aseguró que no se rendirán: “No tenemos miedo porque si nos llega a pasar algo, ya estamos preparados con videos o cartas… vamos a seguir levantando la voz”, dijo, dejando claro que su lucha no terminará hasta conocer toda la verdad.