1. Caramelizar la cebolla
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En una olla grande, calienta la mantequilla junto con el aceite de oliva.
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Añade las cebollas y una pizca de sal.
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Cocina a fuego medio-bajo, revolviendo de vez en cuando, hasta que las cebollas estén doradas y caramelizadas (aprox. 25-30 minutos).
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Si deseas acelerar el proceso, agrega 1 cucharadita de azúcar.
2. Agregar líquidos
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Incorpora el vino blanco (si lo usas) y deja que se reduzca 2-3 minutos.
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Añade el caldo, sal y pimienta al gusto.
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Cocina a fuego medio durante 10-15 minutos para que los sabores se mezclen bien.
3. Preparar el gratinado
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Precalienta el horno a 200 °C.
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Coloca rebanadas de pan directamente en la sopa o sobre cada plato de servir.
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Espolvorea generosamente con el queso rallado.
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Gratina en el horno hasta que el queso se derrita y se dore ligeramente (aprox. 5-7 minutos).