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Ensaladas frescas: lechuga, rúcula, tomate cherry.
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Sopas o cremas ligeras: crema de calabaza o champiñones.
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Salsas suaves: bechamel, mostaza o alioli casero.
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Bebidas: vino blanco seco o cerveza artesanal ligera.
Beneficios de preparar strudel casero
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Control total de los ingredientes, evitando conservantes.
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Personalización del relleno según tus gustos.
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Ahorro económico frente a opciones preparadas.
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Receta rápida y satisfactoria, ideal para compartir en familia.
