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Merengue líquido: claras frías o bol con grasa. Usa claras a temperatura ambiente y utensilios limpios.
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Relleno demasiado ácido: ajusta el jugo de limón y añade leche condensada si es necesario.
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Base blanda: refrigera antes de añadir el relleno para que no se desmorone.
Consejos de presentación
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Decora con rodajas finas de limón y hojas de menta.
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Usa manga pastelera para picos decorativos de merengue.
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Espolvorea ralladura de limón justo antes de servir.
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Acompaña con helado de vainilla para contraste de temperaturas.
Conservación
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Refrigeración: hasta 3 días, siempre tapada.
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Congelación: no recomendable, el merengue pierde su textura al descongelar.
Conclusión
La tarta de crema de limón con merengue es un postre clásico que combina frescura, dulzura y elegancia en cada bocado. Con esta guía detallada, puedes preparar un postre perfecto en casa, ya sea para celebraciones especiales o para disfrutar en familia, manteniendo siempre su textura cremosa, base crujiente y merengue esponjoso.
