👩🍳 Preparación
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Infusionar la leche: En una cacerola, calienta 300 ml de leche con la piel de limón, la canela en rama y un poco de canela en polvo. Si prefieres un toque más dulce, añade un par de cucharadas de azúcar. Deja que hierva y luego retira del fuego, cubre y deja reposar durante 30 minutos.
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Preparar el chocolate: En otra cacerola, calienta 275 ml de leche con el chocolate troceado y la mantequilla. Remueve constantemente hasta que el chocolate y la mantequilla se derritan y la mezcla esté suave.
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Mojar las galletas: Sumerge las galletas en la leche infusionada (del paso 1) durante unos segundos para que se empapen ligeramente, pero sin que se deshagan.
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Montar la tarta: En un molde rectangular, coloca una capa de galletas mojadas. Cubre con una capa de la mezcla de chocolate y repite el proceso alternando capas de galletas y chocolate hasta llenar el molde. Finaliza con una capa de chocolate.
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Refrigerar: Deja que la tarta repose en el refrigerador durante al menos 4 horas, o preferiblemente toda la noche, para que adquiera consistencia.
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Servir: Desmolda con cuidado y corta en porciones. Puedes decorar con virutas de chocolate o frutas frescas si lo deseas.