Preparación
1️⃣ Preparar el molde
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Forra un molde de 20 cm con papel de horno humedecido. Esto hará que se adapte mejor a las paredes del molde.
2️⃣ Mezclar los ingredientes
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En un bol grande, coloca: queso mascarpone, huevos, yogur, azúcar, esencia de vainilla, maicena y el zumo de limón.
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Bate con una batidora de brazo hasta obtener una mezcla homogénea, sin grumos.
3️⃣ Hornear
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Vierte la mezcla en el molde preparado, asegurándote de que quede nivelada.
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Precalienta el horno a 210 ºC (410 ºF) y hornea durante 50 minutos.
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Cuando la superficie esté dorada, cubre con papel de aluminio para evitar que se queme. Continúa horneando hasta completar el tiempo.
4️⃣ Enfriar
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Apaga el horno y deja la tarta dentro con la puerta entreabierta para que no se hunda.
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Cuando esté a temperatura ambiente, refrigérala al menos 6 horas o, preferiblemente, hasta el día siguiente.
5️⃣ Servir
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Saca la tarta de la nevera unos minutos antes de servir para realzar su textura cremosa y sabor.
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Opcional: añade mermelada de frutas por encima para un toque fresco y colorido.
✅ Tip:
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La tarta queda más firme y cremosa si se deja enfriar toda la noche en la nevera.
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Puedes acompañarla con frutas frescas o un coulis de frutas para darle un acabado elegante.