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Reemplace progresivamente los alimentos dañinos por opciones naturales y frescas.
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Camine al menos 20 minutos al día para mejorar la circulación.
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Tome suficiente agua, evitando reemplazarla con café o refrescos.
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Si sufre de hipertensión o mareos frecuentes, observe su dieta y elimine, al menos, un producto de esta lista para notar mejoras.
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No se automedique: consulte siempre con un profesional de la salud antes de realizar cambios significativos.
Cuidar los vasos sanguíneos es cuidar la vida misma. La experiencia de esta médica demuestra que pequeños cambios sostenidos en el tiempo pueden garantizar una vejez más clara, activa y saludable.
