Opcional: canela en polvo para dar sabor
Opcional: azúcar glas para decorar
Opcional: mermelada adicional para servir
Preparación
Paso 1: En un tazón pequeño, mezclar la harina, el azúcar, la levadura en polvo y una pizca de sal. Es importante tamizar la harina para evitar grumos y que el bizcocho quede esponjoso. Aquí va un pequeño truco: si no tienes un colador, usa uno fino o incluso una cuchara para mezclar bien todos los ingredientes secos.
Paso 2: Añade la mermelada de fruta directamente al centro de la mezcla de harina y azúcar. La mermelada debe tener una buena consistencia; si está demasiado líquida, el pastel quedará más espeso, así que puedes ajustar la cantidad o hervirla un poco primero. El objetivo es que se note como el corazón aromático en cada bocado.
Paso 3: Vierte el agua mineral con gas y el aceite sobre los ingredientes secos. Mezcla bien con un tenedor o un batidor pequeño hasta que quede suave. El agua con gas ayuda a que la masa quede esponjosa y muy ligera, y el aceite le da una textura tierna. Si quieres que quede perfecta, prepara la masa con movimientos suaves, sin mezclarla demasiado.
Paso 4: Busca un plato hondo o un bol pequeño donde puedas verter la masa. Es importante usar un recipiente apto para microondas o una sartén antiadherente, si prefieres hacer el pastel en la estufa.
Paso 5: Ahora viene la parte mágica: la preparación se coloca en el microondas a máxima potencia durante aproximadamente 1 minuto. Si prefieres usar una sartén, caliéntala a fuego lento, úntala con un poco de aceite, vierte la masa y tápala para que el pastel se cocine lentamente. De esta manera, subirá bien y el sabor de la mermelada se intensificará.
Paso 6: Una vez transcurrido el tiempo, comprueba si el pastel está cocido: inserta un palillo en la masa (cerca del centro); este debe salir limpio. Si no, déjalo reposar otros 10-15 segundos. Retira el pastel, deja que se enfríe un poco (no demasiado, debe quedar tibio y suave) y, si lo deseas, espolvorea con una pizca de canela o azúcar glas. Sírvelo con una cucharada de la mermelada que has reservado aparte para un sabor extra.
Variaciones y consejos
