Reúne las cáscaras de al menos 10 a 15 huevos.
Lávalas bien para eliminar cualquier residuo de clara o yema.
Hiérvelas en agua durante unos 10 minutos. Esto ayudará a esterilizarlas y suavizar su estructura.
Deja que se enfríen, luego tritúralas en un procesador de alimentos o utilizando un mortero hasta obtener un polvo fino.
Una vez realizadas estas etapas, puedes utilizar el polvo resultante de varias maneras. A continuación, te mostraremos algunas aplicaciones interesantes.
Cáscaras de huevo recicladas
Usos en Remedios Naturales
Las cáscaras de huevo hervidas y trituradas pueden ser un excelente ingrediente en varias recetas de remedios caseros:
1. Suplemento de Calcio
Para incorporar el calcio en tu dieta, puedes añadir una teaspoon de polvo de cáscara de huevo a batidos, yogur o ensaladas. Es una forma sencilla de aumentar tu ingesta de este mineral sin tener que recurrir a suplementos artificiales.
2. Tónico para la Piel
Además de consumir las cáscaras, también puedes utilizar su polvo para crear un tónico exfoliante natural. Mezcla dos cucharaditas de polvo con una cucharada de miel y aplícala sobre tu rostro durante 10 minutos antes de enjuagar con agua tibia. Esto puede ayudar a suavizar y rejuvenecer la piel.
3. Tratamiento para Uñas Débiles
Si tienes problemas de uñas débiles, mezcla el polvo de cáscara de huevo con un poco de aceite de oliva y aplica la mezcla en tus uñas. Esto puede ayudar a fortalecerlas y protegerlas de quiebres.
Uso en el Jardín
Las cáscaras de huevo no solo benefician la salud, sino que también son esenciales para el cuidado de tus plantas. Aquí te mostramos dos formas en que puedes utilizarlas en el jardín: