Todo empezó cuando Holly dio en adopción a su pequeño hijo y perdió todo contacto con la familia que adoptó y le dio un hogar a quien nombraron Benjamin Hulleberg.
Cuando el hogar de adopción cerró sus puertas, por lo que el pequeño creció sabiendo su origen pero con la duda de encontrar y conocer a su verdadera madre.
El deseo más grande de Benjamin Hulleberg era poder conocer a su verdadera madre biológica, para poder saber sus orígenes y ver a su progenitora que le había dado su cadena de ADN.
Pues el joven jamás guardó rencor o vio el hecho de ser adoptado, sino que por el contrario reconocía la valentía de su madre biológica al darlo en adopción.
Cuando tan solo era un bebé a sus amorosos padres Angela y Brian y quería expresarle su gratitud por eso.
Por eso hizo muchos intentos por contactar a su madre biológica y conocerla. La única información que tenía de ella era su nombre: Holly, ni siquiera un apellido o algo más concreto para buscarla.