Una pareja quedó conmocionada al ver la ecografía; entonces la enfermera afirmó que se trataba de un caso entre 15 millones.

 

Pero en cuanto la imagen apareció en la pantalla, la enfermera se quedó sin palabras. Intrigada, llamó a una colega. Los Webb, mientras tanto, intentaban comprender lo que sucedía. Y entonces llegó el veredicto: no uno, ni dos, ni tres… ¡sino cuatro bebés! Y todos idénticos. ¿La probabilidad de un parto natural así? Una entre quince millones. ¡Sin duda habían vivido un acontecimiento extraordinario!

Cuatro maravillas, un solo rostro

En junio de 2016, con 33 semanas de embarazo, Bethani dio a luz por cesárea a cuatro preciosas niñas: Abigail, McKayla, Grace y Emily. Aunque nacieron un poco prematuras, las bebés estaban sanas y fueron ingresadas rápidamente en la unidad neonatal.

Pero surgió un pequeño problema que los jóvenes padres no habían previsto: ¡distinguirlas! Como las niñas eran idénticas, pronto se hizo imprescindible un rasgo distintivo. ¿La solución? ¡Esmalte de uñas! Cada una lucía un color diferente en las uñas de los pies. ¡Qué ingenioso

ver continúa en la página siguiente

Continua en la siguiente pagi

Leave a Comment