Introducción
Ligeros, esponjosos y delicadamente dulces: pocos postres pueden rivalizar con la elegancia de un suflé perfectamente horneado. Estos esponjosos suflés de vainilla suben maravillosamente en el horno, creando una superficie dorada y vaporosa con un centro suave que se deshace en la boca. El secreto reside en la cuidadosa incorporación de las claras batidas a punto de nieve a una rica base de vainilla, logrando una textura que se siente como morder una dulce brisa. Perfectos para ocasiones especiales o cuando quieras impresionar a tus invitados con algo clásico y mágico a la vez, este postre captura el encanto de la pastelería francesa en tu propia cocina.
Ingredientes
Para la base del soufflé:
3 cucharadas de mantequilla sin sal
3 cucharadas de harina para todo uso
1 taza (240 ml) de leche entera, tibia
4 huevos grandes, separados
¼ de taza (50 g) de azúcar granulada
1 cucharadita de extracto puro de vainilla
Una pizca de sal
Para espolvorear y servir:
Azúcar glas (para espolvorear)
Opcional: crema batida, frutos rojos o un chorrito de salsa de vainilla.
Preparación
